Podemos poner muchos ejemplos de cantantes que pasan a la historia de la música con una sola canción. Una canción que se convierte en hit y que aporta al artista tantos royalties que no necesita hacer nada más el resto de su vida. Eso lo llamo yo suerte y un marketing muy acertado.
Aquí en Francia si hablas de alguno de estos casos, el más importante sin duda es Patrick Fernández. Era el año 1979 cuando en la radio se empieza a escuchar " Born to be alive". En poco tiempo este tema pasa a ser un éxito mundial en las pistas de baile y un himno para aquellos que vivieron intensamente los 80s.
Como anécdotas quedan sus viajes en concorde a New York para tomar un aperitivo y volver a la hora a París, o los rumores que en su primera gira en EEUU. Madonna era una de sus bailarinas.
De padre español, Patrick hizo estragos con esta canción y se quedo solo en eso, pero es una gran tema y un referente de la música disco.
BORN TO BE ALIVE
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